TARTA BOCADO DE PASTEL DE DIABLO

Esta tarta es la básica y clásica de chocolate. De ella salieron todas las demás tartas de chocolate, es del espectacular libro de Williams Sonoma, todo un clásico de los mejores postres de EEUU, irresistibles para cualquier cociner@. Es imposible resistirse a elaborarlos aprovechando cualquier excusa u ocasión.

INGREDIENTES:

Para la tarta:

1 1/2 taza de harina de reposteria, (187 gramos).

1 1/3 taza de azúcar glas, (260 gramos).

1/2 taza de cacao en polvo, (60 gramos).

3/4 de cucharadita de bicarbonato.

1/2 cucharadita de sal.

1/2 taza de mantequilla fria sin sal a cuadrados, (300 gramos).

1/2 taza de café caliente y fuerte, (250 ml).

1/2 taza de leche, (250 ml).

1/2 cucharadita de extracto de vainilla.

2 huevos batidos a temperatura ambiente.

Para la cobertura:

340 g de chocolate.

1 3/4 taza de nata para montar, (425 ml).

1/2 taza de crema agria, (125 ml).

1/2 cucharadita de vainilla.

Una pizca de sal.

ELABORACIÓN Y COCCIÓN:

Precalentamos el horno a 180 grados y engrasamos dos moldes de unos 20 cm, cada uno con un papel de horno en la base para facilitar el transporte de los bizcochos.

Tamizamos todos los ingredientes sólidos, cacao, bicarbonato, sal y azúcar glas.

Ponemos los trozos de mantequilla en un bol (kenwood) y añadimos todos los ingredientes tamizados, mezclamos bien hasta obtener una masa parecida a una arena fina.

A continuación añadimos los ingredientes líquidos, leche, café, vainilla, y los dos huevos batidos, batiendo bien hasta que estén todos los ingredientes bien integrados.

Dividimos la masa en los dos moldes a partes iguales ( mis moldes son de 24 cm) porque no tengo dos iguales de 20. Os aconsejo más pequeños porque el pastel debe tener más altura.

Los horneamos 20 minutos a 180 grados con fuerza inferior,(con vapor).

Sacamos del horno y dejamos enfriar 20 minutos sobre una rejilla. Mientras, nos disponemos a preparar la cobertura de la siguiente manera.

Ponemos un cazo con agua al fuego y sobre este un cuenco de acero inoxidable. Ponemos la nata de montar y el chocolate al baño Maria.

En un recipiente mezclamos la crema agria con la cucharadita de vainilla y la pizca de sal, y en cuanto tengamos bien fundido el chocolate y la nata lo retiramos del calor y se lo añadimos hasta que quede bien integrado.

Ya tenemos nuestra ganache o cobertura, preparada para cubrir los bizcochos.

Ponemos uno de los bizcochos sobre una base y encima de él disponemos parte de la cobertura, encima de esta ponemos el otro bizcocho.

Atemperamos la cobertura y cubrimos bien por todos los lados de nuestro pastel.

Decoramos al gusto. Pero no necesitamos ningún adorno especial porque brilla por si solo, tan solo le he pasado un peine de reposteria para que quedase más "Chic".